La segunda fase de remodelación del barrio Sacramento fue anunciada en 2008, pero no ha sido hasta este verano del 2012 cuando las máquinas han entrado en las estrechas calles del casco de San Sebastián de los Reyes para empezar lo que, de momento, está siendo una pesadilla para muchos vecinos y vecinas.
Las habituales molestias provocadas por unas obras se están viendo incrementadas por una remodelación en la que Comunidad de Madrid y Ayuntamiento se echan la pelota unos a otros; los primeros porque ellos no hicieron el proyecto, los segundos porque ellos no lo están ejecutando. Mientras tanto las máquinas continúan trabajando sin que nadie atienda las quejas de la población que ya ha recogido más de 600 firmas para pedir modificaciones en un proyecto que en algunos casos ni siquiera está respetando la normativa sobre bolardos o escalones.
Una de las peticiones de la ciudadanía tiene que ver con el pavimento elegido, el adoquín, que provocará un mayor ruido con el paso de los coches, no suponiendo ningún freno a la velocidad, como ya están comprobando el la única calle terminada y abierta al tráfico.
Las farolas, muy próximas a las ventanas, también son motivo de queja. Algo a lo que los vecinos ven fácil solución usando luminarias colgantes entre fachadas como ocurre en algunas calles de Alcobendas, o sacando las farolas a isletas en la línea de aparcamiento como ha hecho el propio Ayuntamiento de San Sebastian de los Reyes en algunas calles del casco antiguo.
Precisamente el aparcamiento es una de las preocupaciones de los vecinos y vecinas del barrio. Con la obra desaparecen 124 plazas de aparcamiento, lo que unido a que la zona está rodeada de tramos con estacionamiento regulado (Zona Azul) convertirá en imposible el aparcar en el barrio o cerca.
En resumen, unas obras que están provocando numerosas molestias, que no tienen un beneficio claro para la población y con las que vecinos y vecinas se sienten indefensos pues nadie da solución a sus problemas, al tiempo que temen que los desperfectos que ya han ocasionado no se reparen adecuadamente.
Es por ello que una vecina acudió la semana pasada al pleno, para trasladar al Alcalde y a toda la corporación la situación que están sufriendo en el barrio.