Los vecinos y vecinas de la plaza de Ciudad Real en el Barrio de los Arroyos llevan más de un mes protestando por la instalación de dos antenas de telefonía en la azotea de su edificio. Izquierda Independiente ha querido saber la situación legal de los equipos instalados, y el análisis de los expedientes para la concesión de las licencias revela una serie de omisiones que hacen que la autorización dada no se ajuste a la propia ordenanza municipal.
En concreto en el artículo 111.3 de la ordenanza de tramitación de licencias dice que la documentación necesaria para solicitar una licencia de actividad debe incluir la “Relación de propietarios y/o vecinos o colindantes afectados”. Así mismo el artículo 112, que recoge la documentación específica a aportar para la implantación de antenas de telefonía, indica en el apartado 5, que debe aportarse “Autorización del titular o titulares del predio (heredad, hacienda, tierra o posesión inmueble) donde se ubique la instalación, mediante la aportación de copia del contrato privado suscrito”.
Ninguno de estos documentos fue entregado por Vodafone ni requerido por el Ayuntamiento, por lo que, cuando se concedió la licencia el pasado 15 de abril, no se había informado a los vecinos ni Vodafone tenía autorización del propietario para la instalación, ya que la cubierta del edificio es un elemento común y la Comunidad de Propietarios de la Plaza de Ciudad Real se ha opuesto en varias ocasiones a que se instalen antenas.
Según Rubén Holguera, Portavoz de Izquierda Independiente “Es manifiesto el error cometido, que ha provocado la indefensión de los vecinos y vecinas y la usurpación de un espacio de su propiedad”. Para Holguera “El Ayuntamiento debe anular inmediatamente la licencia concedida a Vodafone en base a las omisiones demostradas en la tramitación”.
En el caso de la segunda antena, de Telefónica Móviles, solamente tras las protestas de la ciudadanía, el Ayuntamiento ha dado traslado de la solicitud a los colindantes y se ha requerido a la operadora para que demuestre que tiene autorización del propietario, algo que no podrán hacer al haberse opuesto la Comunidad de Propietarios a la instalación de la antena.
Para Holguera esto supone que “En este caso todavía no se ha dado la licencia, y no debería darse nunca pues no cuenta con la autorización del titular. Sin embargo la antena está instalada y no se sabe si funcionando. El Ayuntamiento debe iniciar ya el expediente de desmontaje, al no contar la instalación con la necesaria autorización”.
Izquierda Independiente pidió en el anterior mandato la redacción de una nueva ordenanza para la concesión de licencias de antenas de telefonía para que el Ayuntamiento pudiese evitar la instalación de estos equipos cerca de lugares especialmente sensibles como colegios, hospitales, o zonas infantiles.