La Marea de Residencias está integrada por personas usuarias, trabajadoras, familiares y ciudadanía preocupadas por el estado de abandono en el que se encuentran muchas personas mayores.
Una Ley que garantice el bienestar de las personas mayores
En nombre de este colectivo, y de la asociación de personas mayores de San Sebastián de los Reyes, AMAPACI, Izquierda Independiente presentó el pasado octubre una moción para pedir la aprobación de una Ley de Residencias que fije y garantice unas ratios mínimas de trabajadores así como que imponga un mayor control de la Administración sobre la gestión de estos centros. El partido local consiguió el apoyo de todos los grupos políticos convirtiéndose así en Declaración Institucional.
23N- manifestación en Madrid
Ahora, Izquierda Independiente se suma también a la manifestación organizada por esta Marea y que tendrá lugar el 23 de noviembre, a las 18h, de la Plaza de Cibeles a la Puerta del Sol en Madrid.
Falta de personal y de control de las administraciones, alguno de los principales problemas
Algunas de las reivindicaciones de este colectivo son, además de la tramitación de la Ley de Residencias, que todos estos centros tanto de mayores como de diversidad funcional sean 100% públicos y con un modelo socio-sanitario. En el caso de las concertadas, solicitan que cumplan los mismos requisitos que las públicas. Afirman que solo así se evitará que sigan dirigiendo sus esfuerzos a aumentar los beneficios en detrimento de las personas residentes, como ahora ocurre en temas tan importantes como la calidad y cantidad de comida, del aseo, ciudados especializados y del número de trabajadores.
También piden que la Administración garantice los derechos de las y los residentes así como unas ratios adecuadas y unas condiciones laborales dignas para todo el personal.
“Es una realidad que un porcentaje muy elevado de estos centros tienen graves problemas derivados de la alarmante falta de personal, lo que se agrava cada vez más ante el mayor número de personas calificadas como “dependientes”. Existen demasiados ejemplos de falta de atención a personas mayores que necesitan ayuda con la movilidad o que sufren deterioro cognitivo y que son “aparcadas” día tras días. Conocemos de primera mano la frustración que sienten las y los profesionales al no poder dedicar a cada paciente el tiempo que necesita y cómo esa sobrecarga de trabajo deriva en situaciones que ponen en peligro no solo la dignidad de las personas mayores, sino también su salud y su integridad física. Por ello apoyamos la reivindicación de conseguir una Ley de Residencias que fije unas garantías mínimas para nuestros mayores. Tenemos la obligación moral de garantizar el bienestar de aquellos y aquellas que han dedicado su vida a mejorar la de sus familias y la de la sociedad en general y que ahora necesitan cuidados y atenciones dignas”, comenta Juan Torres, portavoz de Izquierda Independiente.