Llega el turno de Francisco Camps ante el juez. Tras las declaraciones de ayer del secretario general del PP valenciano, Ricardo Costa, y del ex vicepresidente del Consell Víctor Campos, el presidente de la Generalitat comparece hoy a las diez de la mañana en el Tribunal Superior de Justicia de Valencia, imputado por un supuesto delito de cohecho relacionado con la trama de corrupción masiva dirigida por Francisco Correa y que salpica al PP.
Camps, que ha llegado temprano -a las 08.50- al Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana acompañado por sus tres vicepresidentes, adquirió trajes en diferentes tiendas por valor de 12.783 euros que fueron pagados por Orange Market, una de las empresas vinculadas a la red de corrupción, según las investigaciones del juez de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón antes de inhibirse en favor del tribunal valenciano. De acuerdo con el auto del magistrado, el jefe del Ejecutivo valenciano recibió los trajes a cambio de adjudicaciones a la empresa de la trama entre 2005 y 2009 por valor de unos cuatro millones de euros.
A las puertas del Tribunal le esperaban los tres vicepresidentes del Consell, Vicente Rambla, Gerardo Camps y Juan Cotino, así como la alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, que había llegado unos minutos antes. A su llegada, Camps, que no ha hecho declaraciones a los medios de comunicación, ha saludado a algunos de las decenas de simpatizantes del PP que le esperaban congregados a las puertas del tribunal desde las 8.30 horas, con banderas de la Comunidad Valenciana y pronunciando gritos de "Presidente, presidente", acompañados de aplausos.
Declaraciones de Betoret y el Bigotes
A la comparecencia del presidente valenciano le seguirán el ex jefe de Gabinete de la Consejería de Turismo y actual responsable de Protocolo de la Diputación de Valencia, Rafael Betoret, citado a las once de la mañana y el presidente de la empresa Orange Market, Alvaro Pérez, El Bigotes, quien ya declaró el pasado 12 de febrero ante Garzón y hoy lo hará a mediodía. Según concretaba el auto de inhibición de Garzón, Camps acudía a Madrid a instancias El Bigotesz, para adquirir ropa en las tiendas de Milano y Forever Young, en las que trabajaba como sastre el testigo José Tomás.
Camps, quien ha venido defendiendo su inocencia desde que saltó el escándalo, afirmó en una sesión de control parlamentario el mes pasado que tenía unas "ganas locas, locas" de explicarse y de certificar ante el juez que no hay "nada de nada" del supuesto delito de cohecho que se le atribuye. El presidente valenciano aseguró que se trataba de un montaje político y pronosticó que pronto se sabría "la verdad".
En función de cómo avance el caso Gürtel el PP estudia adelantar las elecciones o relevar en el cargo a Camps. Uno de los nombres que suena con más fuerza en caso de producirse ese cambio es el de la alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, cuyo número dos, Álvaro de la Cruz, adjudicó dos actos a Correa. La Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP), adjudicó a una de las empresas de la trama, Special Events, la celebración de sus asambleas generales en 1999 y 2003, operación que costó 800.000 euros.